Se dice que en la vida se aprende mejor a golpes y caídas, sí, si se aprende mejor, pero sobretodo se asimila y se evitan esos mismos errores a futuro, me pasa cómo voy comprendiendo la vida conforme va pasando el tiempo, es válido cometer errores, está bien equivocarse es parte de nuestra naturaleza “prueba y error”, para de ahí tener un mejor desempeño mental y emocional, más lo que es no válido es cometerlos dos veces, hoy por hoy agradezco tantos errores, tantas caídas porque estoy justo donde quiero estar, justo donde me está gustando estar, donde estoy luchando día a día.
Más allá de lo mencionado, más allá de lo visible, hay una parte de la cual nos olvidamos y es la mejora de la comunicación con quien tú gustes, quieras y mandes, es pulir día a día esa libertad de decir lo que pensamos y expresar libremente nuestra opinión que sabremos que no serán palabras en vano y que serán valoradas, aunque el saber escuchar cuando existe un sentimiento de por medio es complicado mas no imposible, valorar esa característica hoy en día es muy importante porque ha dejado de tener importancia en muchas personas o simplemente complicado aplicarla, si escuchamos y guardamos silencio en el cien por cierto de las ocasiones encontraremos la respuesta a lo que nos “recomiendan” dentro de las mismas palabras, la sinceridad viene siempre de la mano con un comentario siempre constructivo y una solución aunque este último entre líneas, para las cuales hay que abrir completamente nuestros sentidos, el secreto es guardar silencio, porque nuestro mecanismo de defensa es natural e instintivo, reaccionamos inmediatamente, si esa parte la aprendiésemos a manejar créanme sería un mundo totalmente distinto al cual conocemos.
Pero como controlar ese mecanismo de defensa automático listo para activarse en casos así, si es instintivo y natural o si hay sentimientos de por medio, he estado practicando la lección de los tres monos sabios dentro de la meditación, primero hay que observar, después escuchar y por ultimo decidir, ahora va la paradoja de este punto: “Para observar no necesitamos escuchar, para escuchar no necesitamos ver y para decidir no necesitamos hablar.” Como es esto posible, repetidamente siempre diré que a base de paciencia, siempre la respuesta correcta es la primera que se te viene a la mente durante un examen, el cerebro tiene una capacidad increíble de comprensión, una capacidad increíble de asimilar las situaciones de manera inconsciente y que es proyectada en nuestro ser dándonos “cierta seguridad” solo hay que dejarlo un poco más libre, confiar en este, pero como liberas esta parte, dejando fluir las situaciones, sin embargo no por ello signifique ser de los que se dejan ir con la corriente, si no, más bien guiarnos con la corriente y tomar decisiones de la manera más asertiva, estoy en total acuerdo de dejar fluir las cosas, pero no estoy de acuerdo con dejar las cosas al aire, la asertividad junto con dejar fluir las cosas, nos hará llegar a un resultado, poner mucha atención a los más pequeños detalles que son los más importantes, que son los que nos van dictando como se verá el día de mañana.
Ahora como dejas fluir las cosas si volvemos al punto de partida, aquí la paradoja se vuelve un poco más compleja, recuerdan que alguna vez les dije que la vida es una espiral, aquí en esta lección una de las complicadas es una espiral muy engañosa que aparentemente crees aprendida pero no, vuelves a comenzar si no ponemos atención a esos detalles, si ya sabemos observar, sabemos escuchar, sabemos decidir y sabemos ser asertivos en nuestro paso con la corriente, ahora tocara dejar ir todo, soltar y a tener desapego a la persona con quien quieres estar, para que exista una real conexión, en castellano darle su espacio y tiempo de decisión, pero como lograr una conexión libre, sin apego y dejándola en libertad, haz escuchado el dicho “cuando te toca aunque te quites y cuando no te toca aun que te pongas.” El destino es, sin más ni menos, lo que será pasara, lo que debe será y lo que no, algo aprenderemos de ahí, si caemos teníamos que caer, para seguir aprendiendo las lecciones de vida, no podemos asegurar no equivocarnos más, no podemos seguir viviendo con miedo a ser heridos o caer, ya sabemos cómo levantarnos, el miedo lo único que nos puede llegar a traer es arrepentimiento y soledad, tantas cosas que en este momento has de estar pensando o que te estoy recordando “si hubiera…” “si tan solo hubiese tenido más valor”, “si …” pero no, no existe, espero que ya hayas aprendido un poquito más de mis creencias, vive la vida sin miedo a caer, a equivocarte, a llorar, a que te rompan el corazón, sé un ser libre que da amor, que tarde que temprano el destino llegara en el tiempo perfecto de la vida, yo no mentiré y diré que mi vida es perfecta, porque no lo es, tengo muchos defectos y tengo un mundo de cabeza, pero estoy de pie y estoy en paz conmigo mismo.
Te confieso algo… No tengo miedo a nada, solo estoy viviendo, amando libremente, disfrutando el paisaje de este camino, si ha de pasar, sucederá y si no… Pues no… Solo sonriamos a la vida que el universo nos recompensara con el triple de lo que proyectemos.
Excelente día,
Iván Hernández.